El rendimiento de combustible es un tema crucial para cualquier conductor, ya que afecta directamente al presupuesto mensual. Cuando hablamos de rendimiento nos referimos a cuántos kilómetros puede recorrer un vehículo con una cantidad específica de combustible, generalmente un litro. Mejorar este rendimiento no solo ayuda a ahorrar dinero, sino también a reducir las emisiones contaminantes. Pero, ¿cómo saber el rendimiento real de mi vehículo? En auto.cl armamos esta guía para que puedas sacarlo con exactitud y de forma sencilla.
Tecnología del motor. El tipo de motor y su eficiencia juegan un papel fundamental en el consumo de combustible. Los motores pequeños y modernos tienden a ser más eficientes que los motores grandes y antiguos. Por ejemplo, los motores turboalimentados logran producir mayor potencia sin aumentar considerablemente el consumo de combustible, mientras que los motores híbridos combinan electricidad y combustible para maximizar la eficiencia. Los autos con tecnologías más antiguas, como los motores de carburador, suelen ser mucho menos eficientes comparados con los modernos sistemas de inyección directa.
Un motor que no está optimizado, ya sea por falta de mantenimiento o por tecnologías obsoletas, requerirá más energía para realizar las mismas tareas, lo que se traduce en un mayor consumo de combustible.
Condiciones y estilo de conducción. Cómo conduces tu vehículo también tiene un impacto directo en el consumo de combustible. La conducción en ciudad, con constantes detenciones y aceleraciones, es considerablemente menos eficiente que la conducción en carretera. Esto se debe a que cada aceleración demanda más energía del motor y, por lo tanto, más combustible.
Cuidado del vehículo. El estado de mantenimiento del vehículo afecta de forma significativa su eficiencia de combustible. Algunos aspectos clave son:
Mantener una velocidad constante es clave para mejorar el rendimiento de combustible. De hecho, conducir a velocidades muy altas puede aumentar el consumo debido a la mayor resistencia del aire, lo que hace que el motor trabaje más. Por ello, evitar aceleraciones bruscas y frenar de manera gradual puede tener un impacto positivo en el rendimiento.
Carga y aerodinámica. Cargar tu vehículo con objetos o con demasiado peso puede afectar la eficiencia de combustible. Mientras más pesado esté el auto, más trabajo tendrá que hacer el motor para moverlo. Del mismo modo, usar accesorios externos, como portaequipajes, aumenta la resistencia al aire, lo que también genera un consumo mayor.
Uso del aire acondicionado. El uso del aire acondicionado puede aumentar el consumo de combustible en condiciones calurosas. En promedio, el uso del aire acondicionado puede reducir la eficiencia de combustible entre un 5% y un 10%, dependiendo del tamaño del vehículo y las condiciones de manejo. Utilizarlo de forma moderada y abrir las ventanas cuando sea posible puede ayudar a conservar combustible.
Primer paso: registro de kilómetros recorridos. Si tu vehículo no tiene la opción de medir los kilómetros de viaje con un contador digital ("TRIP"), lo primero que debes hacer es llenar completamente el estanque de combustible y anotar el número de kilómetros que marca el odómetro en ese momento. Si tienes la función "TRIP", reinicia el contador al llenar el estanque para comenzar el seguimiento desde cero.
Segundo paso: carga de combustible y registro. Cuando sea el momento de recargar combustible, debes registrar nuevamente la cantidad de litros que cargas en el estanque y el nuevo kilometraje. Esto te permitirá tener una referencia clara del combustible consumido y la distancia recorrida.
Cálculo del rendimiento de combustible. Para calcular el rendimiento, simplemente debes dividir la cantidad de kilómetros recorridos entre la cantidad de litros de combustible cargados. Primero, resta el kilometraje inicial del final para obtener los kilómetros recorridos, luego divide esa cifra entre la cantidad de litros.
Ejemplo: Si el odómetro muestra 35,250 km, anota ese valor o reinicia el "TRIP" si tienes la función disponible.
Ejemplo: Carga 40 litros de combustible y observa que el nuevo kilometraje es de 35,650 km. Registra ambos valores.
Ejemplo: Si recorriste 400 km y cargaste 40 litros de combustible, el cálculo sería:
400km/40litros=10km/l
Esto significa que tu vehículo ha recorrido 10 kilómetros por cada litro de combustible. Este paso lo puedes repetir en distintos escenarios, como en la ciudad y en la carretera, para conseguir un resultado más exacto.